7 sencillos consejos para llevar correctamente la mochila

El 80% de la población adulta en España sufre algún episodio de dolor de espalda, pero cada vez hay más niños que se quejan de este dolor. ¿La gran culpable? La mochila… El peso excesivo que la mayoría de niños cargan en sus mochilas y, sobre sus hombros, está llevando a muchos niños a sufrir lesiones de espalda, debido al sobre esfuerzo y a la fatiga muscular.

A la hora de comprar una mochila nueva, tenga en cuenta estos sencillos consejos, sirven tanto para niños como para mayores:

1- No cargue más de un 10% de su peso. Por ejemplo, si pesa 55 kilos, puede llevar en la espalda un máximo de 5,5 kilos.

2- Use mochilas con cintas anchas y acolchadas que se acoplen bien al hombro.

3- Lleve la mochila siempre en los dos hombros.

4- Coloque primero los objetos pesados. Además, estos deben quedar en la parte de la mochila mas cercana a la espalda.

5- Para levantar la mochila, hay que agacharse doblando las rodillas o, mucho mejor, cargarla sobre una mesa y colocársela a la espalda desde ahí, sin agacharse.

6- Mantener la columna recta y no curvada, para llevar la mochila.

7- Repartir el peso. En el caso de que haya mucho material, llevar parte del peso en las manos.

 

Para mochilas de ruedas, la posición ideal es empujar la mochila con las dos manos, no tirar de ella. Si la mochila va por detrás y tiramos de ella ejercemos tensión sobre la musculatura cervical y del hombro. Esta tensión puede desencadenar contracturas musculares, desequilibrios musculares, tendinitis de hombro y lesiones de columna vertebral. Cuando la mochila va detrás la columna lumbar se extiende para poder tirar de ese peso, lo cual favorece el desgaste del disco intervertebral.

 

OTROS CUIDADOS IMPORTANTES

Tampoco hay que olvidar que es muy importante sentarse bien, con la espalda derecha y apoyada en el respaldo, tanto en el pupitre del colegio como cuando se ve la tele. Hay que cuidar la postura también cuando se duerme, procurando tener una almohada con la altura adecuada para no forzar el cuello. Por último, llevar una vida activa y practicar deporte, acordándose siempre de calentar antes y de realizar estiramientos al finalizar la sesión.

 

¿LA QUIROPRÁCTICA PUEDE AYUDAR?

El quiropráctico es un experto en el cuidado de la columna. Utilizando un método suave y conservador, restablece la salud de la columna de su hijo y puede ayudarle a crecer de forma sana y alineada. También les puede aconsejar sobre cómo llevar la mochila, y qué ejercicios hacer para ayudar a proteger la columna de esa pesada carga.